viernes, 22 de junio de 2012

NN.

El instante que callaste fue el rencor en mis pupilas,
Y el tiempo transcurrido no cura mis heridas.
El recuerdo de tus labios es mi droga día a día,
Y por ti daría mi vida como enfermo por pastillas.
Al pensar que me dejaste yo me hundí destruida.
Y el momento que me fallaste fue la culpa que existía.
Del rencor salio tu odio y del silencio la ironía.
Si existiera alguna forma de evitarlo lo haría,
todo con el fin de no soltar esta agonía.


No hay comentarios:

Publicar un comentario